La encantadora Villa de Cerocahui está ubicada en el
borde de la
Barranca de Urique
— la más
profunda del sistema — en un valle salpicado con huertos de
manzanas. La villa está a unos 12 Km. de la estación de
Bahuichivo en la cual el Chihuahua al Pacifico realiza una
parada diaria. Sus 900 habitantes llevan una bucólica vida
que muchos de nosotros, en la agitada ciudad, añoramos. |
Cerocahui fué visitado por primera
vez por extranjeros en 1679, cuando el Jesuita Padre Pecoro se quedó por un
corto período de tiempo y reportó que los indígenas no estaban listos para
aceptar su fé. |
El 23 de Noviembre de 1680 el
sacerdote Jesuita padre Juan Maria de Salvatierra llegó a Cerocahui.
El entusiasta sacerdote Italiano inició la enseñanza
del Cristianismo y la construcción de la iglesia de la misión. El sacerdote
permaneció en el área por 10 años y luego se fué a Loreto, en donde construyó la
primera misión establecida en Baja California. |
Los Jesuitas
continuaron su trabajo en Cerocahui hasta el año 1767,
cuando fueron llamados de nuevo a España como resultado de
diferencias políticas con el rey Español. Fueron enviadas
órdenes desde la Ciudad de México para que la misión fuera
clausurada — los Jesuitas apenas si tuvieron un mes para
abandonar el país. |
No contamos
con más historia escrita hasta 1936, cuando los Jesuitas
regresaron encarnados en el dinámico Padre Andrés Lara, el
hombre al que se le acredita la fundación de Cerocahui. |